domingo, 28 de diciembre de 2008

Camille Claudel

Necesito retroalimentación y no me la dan,
No se si contratar un profesional y pagarle para que me hable o para que yo le hable o para que me lea y me hable o yo le hable y le lea, en fin que estoy creo en segunda etapa, en segunda base, segundo capitulo, en segundo piso o en segundo sótano, la cosa que necesito retroalimentación y no me la dan.
Puedo entrar a los miles de blogs que voy descubriendo, miles de personas que escriben y se desnudan o escriben y se visten, o escriben y se encubren. Hoy leí en un blog que un especialista le dijo a …..ella ( no recuerdo su blog???? La habre perdido????) que escribir era una forma de huir, puede ser pero siento que el escribir está siendo mas parte de mi vida, que la sola idea de salir y no tener donde escribir me está causando pánico, que la sola idea de empezar a darle forma a mis pensamientos y sensaciones y no poder plasmarlos es como jalar el water con tesoros míos y perderlos en el vacío, en la cloaca de la vida.
Ya recuerdo porque no estudié literatura cuando terminé el colegio, recuerdo que en un momento de lucidez o de cordura me di cuenta que tiendo a sumergirme en el personaje que leo, que me abandono, que me niego y adopto su ser. En ese tiempo leí sobre una prostituta y empecé a analizar la Av. Arequipa y las observaba y cada día me acercaba un poquito más a ellas porque estaba haciendo el curso de manejo en el Touring y cuando por fin un carro paró, me dio ataque y pude huir, huir de mi personaje y huir de mi entrega absoluta a lo que hago. Cerré ese capitulo durante 30 años, me di mucho miedo y hoy he vuelto a abrir la puerta y sigo tan loca como entonces, sigo tan entregada, los 30 años de ingeniería, trabajo, especialidades, idiomas y demás farsas no han amainado esta tendencia a mi entrega, no han podido apagar ese volcán, solo lo han dormido y esta despertando y esta levantándose y esta volviéndose fuerte, muy fuerte. Ahora, con el camino recorrido, con la certeza que lo otro era solo un comercial temo pensar en lo que me volveré, en como me encontraré, en que vida viviré y por que caminos me perderé.
Quizás necesite un bozal mental, emocional, quizás una camisa de fuerza sentimental me ayude a serenarme, a ubicarme, a verme de manera normal y no solo con el antifaz que todo lo que no es auténtico es una farsa. Los esfuerzos sobrehumanos de represión del yo que quiere salir y vivir intensamente y no encasillarse en las normas. Estoy resultando más anarquista que mi amigo M. porque él si puede vivir normalmente sintiendo su anarquismo en su tiempo libre, quisiera que me dé la receta para hacer ese cuadro de doble cuenta, como diría Briguita, que me ha pedido eso para ayer y aun hoy no se a lo que se refiere, pobrecita. Pero es algo tangible que algunos logran hacer y veo que esa facultad se me escapa de las manos, que cada vez quiero emplear mas tiempo y energía en descubrir el mundo en su esencia y no en su apariencia.
Siento que la que vivió estos 30 últimos años va desvaneciéndose para retomar el camino innato que dejó a los 18, puede que pierda la razón en el intento, entonces comprenderé a mi heroína Camille Claudel, la visitaré en su celda, le daré la mano y juntas reescribiremos la historia porque eso no te lo perdono Camille, morir de amor por el cerdo de Rodin, alimentando el ego de él y perdiendote en la esperanza de ser correspondida, eso Camille es peor que tu locura, es hipotecar tu talento y vida por una cucaracha con mejor marketing pero en fin, aun no estamos en la misma celda y cuando lo estemos, reescribiremos tu historia y tus maravillosas esculturas de obsiciana obtendrán por fin el lugar de honor que te corresponde.

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