Despertando

Despertando de la somnolencia de los feriados, de los líos familiares, del aletargamiento del cambio de estación.
Sergio Mendes y sus ritmos eternos me devuelven a mis 18 años cuando soñaba suspirando y escuchando esos ritmos de Boza Nova. Hoy los escucho de nuevo y me río, me río de mis 18 años suspirantes, me río de los líos familiares entre gallinas cluecas, me río de mi jefa enterrada en quinientos análisis, me río con mis amigos y amigas que me siguen consolando y alentando en mis desvaríos escribidores, ya curándose la llaga de haber cometido el Faux Pas literario.
Despertando nuevamente con la música, ya sin mis acompañantes diarios de antaño. Nebuloso y Apachurrable cada uno con sus temas que los alejan de la realidad, cada uno enfrentando un tema de excesivo tiempo libre, cada uno luchando internamente para encontrar su camino de salvación y sobre vivencia dejándome mas naufraga que nunca y conmigo misma, enfrentándome a mi misma sin la distracción bálsama de su compañía, sin la excusa de sus interpretaciones condescendientes, ya sola frente a mi propio verdugo y juez implacable; mi conciencia.